Por: Jarvi Augusto Escobar S.
Un colombiano jugando al rugby en la capital del mundo, con los ribetes de jugador profesional. El sueño se cumplió. En la calurosa Montería se empezaron a fraguar ilusiones en su mente de progresar con este deporte. Julio César Giraldo amplía el ramillete de colombianos que ya se exhiben como talentos de exportación a ligas representativas en el rugby, un deporte que en el 2010 firmó su acta de constitución de la Federación, y en poco tiempo comienza a recoger sus frutos.
El Rugby United New York de la Major League Rugby en Estados Unidos concentra ahora las miradas de los apasionados colombianos por el rugby, y de los practicantes en el país que ven cómo pasan del amateurismo al profesionalismo, aspecto que los hace soñar y que se vislumbra como una realidad en sus proyectos de vida.
Con Julio César Giraldo dialogamos para conocer del ser humano, lo que pensaba, haciendo una retrospectiva desde su niñez, y cómo se ha ganado un espacio a pulso ahora como jugador profesional. Su debut es la noticia, pero detrás hay una persona incansable, trabajadora, soñadora, inteligente y con gran proyección. Un embajador por excelencia del deporte colombiano.
Qué recuerda de su niñez:
Recuerdo mucho la etapa en el colegio, fue una etapa muy divertida, la pasaba muy bien en el colegio. Recuerdo mucho siempre llegar del colegio e ir a jugar con mis amigos o practicar algún deporte. Recuerdo mucho mi mamá esperándome en la cancha ya que el transporte del colegio me dejaba en las canchas de fútbol, y allí estaba ella mientras estudiaba su carrera. Viví en varios barrios, pero el mayor tiempo fue en el barrio Buenavista y La Castellana de la ciudad de Montería. Mis papás se dedicaban al comercio de abarrotes y ropa femenina.
Cuándo nace la pasión por el rugby y cuando lo empezó a practicar:
El rugby lo vi por primera vez muy niño en una película, desde ahí me quedó en la cabeza ese deporte. Pero no lo había en Montería. Un día un amigo Carlos Ochoa me invitó a entrenar en un equipo que se llama Caporos de la ciudad de Montería, en la cancha del barrio Buenavista, mayo del 2011, allí empezó todo.
Sueños de infancia:
Siempre quise dedicarme al deporte, me apasionan mucho los deportes. Me encantaba el fútbol, soñaba en ser una estrella del fútbol. Me gustó mucho el boxeo y el fútbol. Un tiempo intenté hacer boxeo, fútbol y rugby, pero no me daba el tiempo.
Una anécdota de niñez:
Que quizás mi camino hubiese sido otro si mis papás no me hubiesen involucrado en los deportes, creo que fue una pieza fundamental.
Primeros compañeros:
En Caporos tuve muchos compañeros, unos iban y venían. Recuerdo mucho al capitán en ese entonces Gean Muñoz, a un gran jugador llamado Jean Carlos Sierra, Juan Camilo Sierra, Andrés Duque, Charrasquiel, varios aún juegan para a Caporos.
En selección Colombia mis compañeros que más recuerdo, Jorge Araque, Sebastián Zurique, Jorge Álvarez, Alejandro Vanegas, Dani Giraldo, Divier Ceballos, Andrés Zafra. Los últimos tres también profesionales hoy en día.
Paso por selección Colombia Tucanes
Mi paso por la selección fue en el 2011-2012-2013. Mis primeros entrenadores fueron Mauricio Henao, David Jaramillo, Lucas Caro (que en paz descanse), William León, Jorge Acevedo. Aprendí demasiado, fue mi primera experiencia con entrenamiento de alto rendimiento y con profesores con demasiado conocimiento, le dio un impulso y sueño a mi carrera como jugador. Fue difícil ya que venía de un club en el que a veces no contaba con entrenador, pero me gané el puesto varias veces y subí de nivel rápido.
Llegada al rugby en Estados Unidos
Se dio en el 2015, luego de un semestre en la Universidad Cooperativa de Colombia, me di cuenta que quería vivir por fuera y estar en un país donde pudiera hacer deporte, estudiar y trabajar.
Llegue a Old Blue en 2015, lo tomé como un reto y a la vez de aprendizaje, pero quería subir más mi nivel y poder jugar en Nueva Zelanda, ese era mi sueño (jaja).
El nivel de la MLR
Hay muchos jugadores extranjeros con experiencias profesionales, y muchos jugadores en clubes locales como yo que están en un nivel muy alto, y por encima hay leyendas del rugby mundial, en mi club Mathieu Basteraud y Ben Foden.
Entonces todo esto más entrenadores de élite hacen el nivel más alto y pienso que cada año es más difícil jugar en la MLR, creo que será una liga muy top, Estados Unidos es un gran país y todos los jugadores quieren vivir y jugar rugby en América.
Son 12 equipos, cada uno juega 16 partidos, la mitad son en casa. Luego los 4 mejores juegan semifinal y final.
El debut
Haber debutado fue muy lindo, llevo una década entrenando y jugando a mi 100 por ciento y el hecho de ya por fin jugar en una liga profesional y tener ese reconocimiento a lo trabajado es lo que más me hace feliz, porque no es solo haber debutado el domingo o estar en el equipo, es el hecho de todo el trabajo fuerte durante tanto tiempo.
Me siento muy bien en esta liga, siento que puedo jugar muy bien y que cada semana aprendo mucho más. Creo que por el momento no pienso a dónde me va a llevar esto. Quiero disfrutar este momento y aprender mucho de mis entrenadores y amigos y así poder ser un grande en este equipo y luego quizás en algún otro equipo. El entrenamiento que recibo y la experiencia de mis compañeros es grande, aprendo y me acoplo muy rápido a todo.
Qué puede aportar al rugby colombiano
Siento que puedo aportar al rugby de Colombia en ayudar a que más colombianos vengan acá a la MLR o que el nombre de Colombia suene por fuera de Suramérica y sean todos los jugadores allá considerados para jugar profesionales en otros países, ya que están en un nivel profesional de lo buenos que son.
A quién admira en el rugby y en general en el deporte
En el rugby admiro a Richie McCaw. Lo admiro porque no es el jugador perfecto, pero es un jugador que siempre se mantuvo en un alto nivel toda su carrera, conquistó muchas cosas en su carrera y era un líder. Me gustaba mucho verlo jugar.
Fuera del rugby admiro mucho a Mohamed Ali, casi por las mismas razones que McCaw, no era el mejor pero conquistó el mundo, hizo cosas grandes. Me gustan mucho sus frases y motivación, lo utilizo a veces antes de entrenar.
Anécdota en el debut:
Antes del debut mi capitán Dylan Fawsitt me dijo: Just another game… solo otro juego. Me hizo recordar e intentar sentir que estaba en Old Blue o en Caporos. No hay que ponernos emocionales a la hora de jugar rugby, emocional solo antes, pero a la hora de entrar solo hay que pensar en el juego.
Contra quién fue su debut y qué instrucciones le dieron:
Mi debut fue contra Boston Free Jacks. Juego de tercera línea, número 7. Me pidieron hacer mi trabajo, no intentar lucirme y no esconderme, pues son dos cosas que si las haces en un partido y más en un debut puede acabar todo muy mal o muy bien. Así que me dediqué a lo seguro y básico, hacer mi trabajo y así tener la confianza de los entrenadores.