Por Alex Burbano Abosaid

Coordinadora de Comunicaciones Cafeteros Pro

 

La sonrisa y los nervios de Santiago Vanegas, durante esta charla curiosa en la informalidad, sólo reafirma su capacidad de trabajar fuertemente detrás de bambalinas por un proyecto de alto rendimiento. Esta historia no solo habla del espacio transformador que crea el rugby sino de la capacidad para hacer historia dentro y fuera del campo de juego. En la voz del fisioterapeuta encargado en Cafeteros Pro, compartiremos la experiencia de este vuelo hacia el rugby profesional.

 

Luego de dos años de graduado, llegó al rugby profesional de forma instantánea, como dice él. Lo contactó el médico de Indeportes, Oscar Mario, poniéndole el primer reto dentro de su carrera profesional: “Ha sido un trabajo lleno de aprendizajes y desafíos constantes, he tenido que adaptarme a un deporte con alto contacto, sin embargo, encuentro en este proceso enseñanzas que solo este deporte podría ofrecerme: como las dinámicas de la fisioterapia en el trabajo de campo, las necesidades que encuentra el cuerpo técnico con respecto a lo que sucede en tiempo real, y el conocimiento y monitoreo constante de los jugadores debido a su exigencia física.”

 

Desde su profesión, el rugby representa una extrema concentración, su enfoque durante los partidos es similar al de un jugador. Desafía la atención al detalle y la alerta para atender cualquier situación con la inmediatez que demanda un deporte tan exigente como este. Y bueno, Santi sabe sobre la exigencia del alto rendimiento.

 

Como el deportista profesional del Hapkido que es Santiago, se conecta en muchos frentes con la experiencia que ha representado Cafeteros Pro. Sabe sobre el compromiso y disciplina que exige este nivel deportivo, sumando las necesidades que el alto impacto requiere desde la fisioterapia. Pasar tanto tiempo en el equipo, además de ampliar su espectro, ha generado varias conexiones con el ambiente y estilo de juego: “por ejemplo el trabajo de los backs me identifica porque la velocidad que requieren en el campo es fascinante, realmente en aspectos generales, me gustan demasiadas cosas del rugby, porque se nota que el juego no es de solo contacto, sino que cada uno de los jugadores tiene que prepararse metódicamente para cumplir su labor en la cancha.”

 

Además, enfatiza en el cambio de mentalidad de quienes practican con seriedad el rugby en este proyecto de alto rendimiento. “Esta oportunidad permite que lo que se pensaba como un hobby, se convierta en un estilo de vida y una oportunidad para poder vivir de ello. La responsabilidad que tienen los jugadores comienza a ser totalmente profesional, porque ahora van a vivir para competir y se debe tener un estilo de vida donde yo me cuide, donde yo me alimente y donde yo esté completamente conectado con el deporte que estoy practicando”.

Su conciencia y dedicación, ha fortalecido a Cafeteros Pro fuera del campo de juego, no solo en la preparación sino durante el reto de la Súper Liga Americana que actualmente se disputa y de la que forma parte desde el staff técnico, dándole valor al esfuerzo de todos los que aportan a este proceso. “La SLAR es un proyecto que se traza a futuro. Me gusta la idea que los jugadores mantienen el propósito de ganar a pesar de ser un equipo joven. Yo creo que poco a poco crearemos jugadores de alto nivel para que Colombia sea la potencia que puede ser”. La percepción de un deportista de alto rendimiento para la historia del alto rendimiento del rugby colombiano.