Por Andrés Roberto Gómez Castaño

Para el rugby colombiano se viene el reto de seguir avanzando en la construcción de afición, es decir, más personas interesadas por nuestro deporte y en especial por nuestra selección los Tucanes. Indudablemente algunos espejos nos han mostrando el camino, en el caso de Brasil que hace pocos días en un partido de calificación triple A, logró llevar al tradicional estadio de fútbol Molumbi más de 30.000 espectadores, cifra récord para este país en un partido de rugby.

Entendemos las realidades de cada federación en el rugby, la economía del país y de los públicos, así como sus costumbres y tradiciones. Es por ello que consideramos que estamos en un buen punto de inicio, para ir pasando poco a poco a una construcción de afición más amplia, y sobre todo mas participativa con la asistencia a los partidos de los Tucanes en nuestro país. El reto es grande. Actualmente, muy pocos deportes en el país han podido construir afición, se dificulta desde el pensar de sus dirigentes el enfoque de acciones conducentes a esta gran tarea, que es poder tener mas afición en los estadios y coliseos con sus seleccionados nacionales.

Para este 2019 esperamos conocer en mas detalle el caso de éxito de Brasil en este tema específico, también esperamos contar en los partidos de locales con una mayor presencia de las marcas que actualmente nos acompañan en el rugby, tener espacios de experiencias previas al partido y sumar otras marcas interesadas en acompañar el espectáculo. Un antes, durante y después que genere recordación en los estadios. Definitivamente el aspecto clave será construir un interesante espectáculo fuera de la cancha, donde el aficionado que nos acompañe sienta una vivencia única en su entorno, e independientemente si es alguien afín al rugby o no muy conocedor, pueda disfrutar y pasar un espacio de tiempo divertido y acogedor.

Para esta tarea, nuestra organización considera de gran importancia aumentar la masa de posibles fans interesados en nuestro deporte y los tucanes. Actualmente, es indudable que en la población cercana al rugby hemos hecho una gran labor; sin embargo, es una masa aún muy reducida en cantidad que para el salto que deseamos en el corto plazo no es suficiente y; por ello, debemos seguir en esta construcción que se viene en aumento, pero también enfocar otras acciones complementarias que puedan hacer llegar nuevos fans interesados así estos no tengan ninguna relación actual con el  juego; bien sea como jugador, entrenador, padre de familia  o dirigente de rugby.

Con nuestro equipo de comunicaciones y nuestra agencia de publicidad, este próximo 2019 haremos una gran campaña en educación deportiva de rugby dirigida no al público de rugby; sino, a estos nuevos públicos afines y muy de la mano en los grupos de edades que tocamos mejor en la parte digital actualmente como lo son los rangos entre: 18 a 24 años y 25 a 30 años. Con esta campaña en un lenguaje simple, buscaremos mayor interés y sobre todo un mayor conocimiento del juego básico y la lógica interna del mismo en su contexto más general; pero, que les permitan un entendimiento básico del mismo. Consideramos que al ampliar nuestra masa critica en estos públicos permitirá un interés en algunos de estos por sumarse a acompañarnos en los eventos de nuestra selección; donde, con el medio actual de promoción de los eventos y una información previa del rugby para estos, podremos despertar un interés inicial de asistir y ver a nuestros Tucanes. Después de lograr el primer enganche: habrá un interés inicial por ir a ver a los Tucanes que será la clave en la parte vivencial dentro del estadio; ya que, con esto podremos captar un fan interesado en el rugby y; especialmente, con interés en el espacio de entretenimiento general del espectáculo antes, durante y después del mismo.

Por último, consecuencialmente a la mejoración del impacto con nuestro espectáculo y la mayor presencia de marcas en marco de los partidos de rugby llevando experiencias habrá; lógicamente, una población masiva y en crecimiento alrededor de nuestro deporte; por ende, un mayor interés por ese nicho de consumo que tiene un componente definido en sus gustos y afinidades. Esperamos que con esta mezcla de acciones desde lo educativo y vivencial podamos incrementar los ingresos vía sponsor para marcas masivas y que identificando una afinidad, podamos tener una negociación de beneficio mutuo.

 

 

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